jueves, 25 de febrero de 2016

Té y salud, la taza perfecta


Té y salud

¿Qué beneficios aporta el té a nuestra salud? Podríamos decir que innumerables y cierto es, pero queremos que nuestra afirmación tenga una base científica firme. Por eso, hemos creado una sección específica de té y salud donde iremos publicando las últimas noticias al respecto así como los más recientes estudios científicos sobre los beneficios que nos reporta.
Y como anécdota de este apartado y punto de partida, el artículo del médico holandés Mr. Cornelis Bontekoe que ya en 1678 publicó un artículo sobre el té titulado “El té, esa excelente bebida”, en donde enumeraba una larga lista de beneficios que él mismo atribuía a esta bebida:
    Página Té y salud
  • Purifica la sangre
  • Alivia los dolores de cabeza
  • Cura la hidropesía
  • Es un excelente remedio para los catarros
  • Cura el extreñimiento
  • Protege de los malos humores 
  • Es un buen remedio para todos los dolores de vesícula y desórdenes hepáticos
  • Alivia las dolencias del bazo
  • Remedio contra la pereza y la torpeza
  • Convierte a uno en activo y enérgico
  • Hace a uno valiente
  • Elimina el miedo
  • Alivia el dolor causado por cólicos
  • Buen remedio para los dolores menstruales
  • Agudiza la mente
  • Buen aliado para la memoria
  • Refuerza la energía sexual
  • Alivia la sed
  • Espanta la estupidez
  • Alivia la mente de pensamientos oscuros
Y así hasta casi una treintena de beneficios citó este médico ya en el siglo XVII, algunos tan curiosos como “elimina el miedo”, “es un buen remedio contra la pereza y la torpeza”, “protege de los malos humores” o “espanta la estupidez”.
Para conocer todos los estudios científicos y noticias acerca de los beneficios de un consumo moderado de esta bebida, visita nuestra categoría té y salud.

La taza perfecta

El método de preparación de una infusión no difiere del comentado en el epígrafe del té “La taza perfecta“. En este apartado haremos un repaso por los pasos a seguir para preparar una infusión, así como las recomendaciones de conservación para disfrutar siempre de nuestra bebida en las mejores condiciones.
Tetera con infusion
¿Cómo se prepara una infusión perfecta?
Tan solo habría que seguir estos sencillos pasos:
  1. Calentar el agua. En un hervidor o cazo, poner el agua a calentar hasta justo antes de hervir. La temperatura óptima para preparar una infusión son 95 ºC.
  2. Medir. Para ayudarnos en este paso, es recomendable utilizar una “tea cup” o cuchara del té, o en su defecto, una cuchara de postre (las del café son demasiado pequeñas). En el caso de utilizar la cuchara especial del té, tendremos la medida perfecta para preparar la infusión. Por lo general, es una cucharada por cada 200 ml de agua.
  3. Verter el agua. Cuando el agua haya alcanzado la temperatura óptima, echarla sobre la infusión y dejarla reposar. De 5 a 6 minutos de reposo para las infusiones de hojas y flores, y de 8 a 10 minutos para las de frutas y especies.
  4. Filtrar la bebida. Es importante tener en cuenta en el caso de las infusiones que para algunas de ellas será necesario un filtro de mayor tamaño debido al volumen de la misma.
  5. Aderezar. Una vez preparada la infusión, se le puede añadir ingredientes al gusto. Azúcar, miel, edulcorante, limón, cáscara de naranja u otros. En el caso de las infusiones de especies y frutas, también se puede utilizar leche.
Aderezar infusion
Recomendaciones de consumo y conservación
  • Las infusiones se pueden consumir tanto en frío como en caliente. Si bien es cierto que no todas ellas combinan bien en ambas modalidades. Por lo general, es más recomendable consumirlas en caliente porque se aprovechan mejor sus aceites esenciales.
  • Al igual que el té, las infusiones se mantienen mejor si se guardan en un envase hermético para evitar el contacto con el aire, y oscuro, ya que la luz puede oxidar las hojas y flores.
  • Las infusiones no tienen fecha de caducidad, pero sí consumo preferente. ¿Qué significa eso? Con el paso del tiempo las infusiones pueden seguir consumiéndose pero van perdiendo sus propiedades organolépticas, es decir, aroma y sabor. Nuestra recomendación es consumirlas en un plazo aproximado entre 6 meses y un año para disfrutar al máximo de sus propiedades.
Fuente: AeTi/Asociación española de Té e infusiones


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