Crujientes, sabrosas, melosas y más sanas que las patatas fritas. espero que os gusten tanto como a nosotros.
INGREDIENTES
- ½ Kg de patatas
- 1 cdta de pimentón picante
- 2 cdtas de pimentón dulce
- 1 cdta de ajo en polvo
- 1 cdta de comino
- 2 cdtas de tomillo
- Aceite de oliva
INSTRUCCIONES
- En primer lugar tenemos que lavar bien las patatas, porque las vamos a consumir con piel. cuando estén bien limpias las cortamos en gajos. el grosor sólo va a influir en el tiempo que las tengáis que cocinar. metemos los gajos en un tupper sin cerrarlo completamente y lo llevamos al micro durante unos 5 minutos. cuando pase este tiempo las sacamos, pero las dejamos en el tupper para que se terminen de "cocer" con el calor residual.
- Mientras tanto vamos preparando nuestra mezcla de especias. el pimentón dulce de la vera ahumado les da un toque genial, pero podéis sustituir las especias a vuestro gusto (cúrcuma, romero, pimienta, hierbas provenzales,...).
- Sacamos las patatas del tupper y las ponemos en un cuenco. añadimos las especias, salamos, echamos un buen chorro de aceite y removemos bien todo con las manos (cuidado no os queméis) procurando que todas las patatas queden bien impregnadas.
- Precalentamos el horno a 200 grados con ventilador. ponemos los gajos en una fuente para horno con la piel hacia abajo. si nos queda en el cuenco un poco del aceite mezclado con las especias lo repartimos por encima para ayudar a que queden bien doraditas y sabrosas. llevamos la bandeja al horno y esperamos unos 20 minutos. mientras tanto podéis preparar una salsa. en este caso las acompañé de una veganesa con ralladura de lima y la verdad es que les va de lujo. cuando pase el tiempo o las veamos bien doraditas ya las podemos sacar. ¡y listo!
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